Un equipo de arqueólogos descubrió una tumba de hace 2000 años con un total de treinta momias en la ciudad de Aswan, sur de Egipto, informó Live Science.
Según los científicos, se trata de una necrópolis en la que una familia enterró a sus muertos de varias generaciones, abarcaron del siglo I a. C. a los siglos II o III.
El sepulcro consiste de cuatro cámaras, y entre las momias hay restos de diferentes edades, incluidos varios ancianos con artritis, así como niños y un recién nacido.
Esta tumba es una de las 300 encontradas en la zona, esta fue hallada en el interior de una estructura terrestre de mayor tamaño, que podría haberse utilizado también como lugar de sacrificio, según los investigadores.
La arqueóloga Patrizia Piacentini y su equipo, encontraron rastros de fuego en las paredes de la estructura, posiblemente fruto de ese tipo de ceremonia o podrían haber sido hechas por ladrones de tumbas.
Por: Redacción
Editor: Ignacio González
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