El gobernador Miguel Barbosa Huerta admitió que existe un incremento en el robo de combustible en el estado, lo que dijo le preocupa porque puede provocar un repunte de la delincuencia en general.
Consideró que la estrategia de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de Petroleos de México (Pemex) de “solo ir y venir” vigilando los ductos de gasolina, así como cancelando las tomas clandestinas no va a detener el robo de combustible, pues dijo que la única forma de lograrlo es disolviendo las bandas dedicadas al huachicol, planteamiento que ya hizo al más alto nivel de seguridad pública del país.
“Sí observo un incremento del huachicol en Puebla, sí lo observo y lo he planteado como una preocupación porque me puede provocar un rebrote y repunte de la delincuencia en general (…) Es un asunto muy complicado el que estoy viendo está presentándose”, expresó.
El mandatario comentó que el robo de gas LP es menos importante que el robo a gasolina, pero que está presente porque el ducto Coatzacoalcos-Guadalajara que lo transporta pasa por el centro del estado, además reconoció que es una forma de financiamiento para los grupos criminales.
Barbosa Huerta indicó que no puede responder quiénes son los líderes del robo de gas LP en la entidad, pues dijo que no es el fiscal.
