La boxeadora mexicana Alma Ibarra decidió no salir al cuarto round y pidió, con preocupación, detener la pelea que sostenía este fin de semana contra Jessica McCaskill por los títulos unificados de peso welter.
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La pelea fue dominada desde el inicio por la campeona McCaskill que conectó golpes en las partes blandas de Alma lo que provocó que bajara su guardia.
Ante estos golpes, se convirtió en blanco perfecto de fuertes impactos en la cabeza.
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Al finalizar el tercer round, la boxeadora mexicana pidió desesperadamente a su entrenador que detuviera la pelea.
“No. No. Yo solo quiero llegar con vida a mi casa”, dijo Alma Ibarra con desesperación.
Finalmente, el réferi se acercó para ver el estado de la peleadora, pero la esquina le pidió detener el combate.
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Por: Redacción
Edición: Susana Osorio
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