“Con los números que traigo me voy a los playoffs”
Alejandro Armenta
¿Qué exhibieron los números de este fin de semana en Puebla? La fuerza de la coalición vernácula, salomonistas y barbosistas en esencia, al dejar pasar a Julio Huerta y Olivia Salomón, con 64 y 48 votos respectivamente, a la etapa de la encuesta y, al mismo tiempo, cerrarle el paso al senador Alejandro Armenta otorgándole a Ignacio Mier un inmejorable capital político de 44 delegados.
Esa tendencia era evidente desde hace mucho. En mi columna “Hermanas y hermanos”, publicada el 13 de octubre de 2022, compartía con usted la siguiente proyección:
«¿Acaso ve usted a los primos Mier Velazco y Armenta Mier estrechando lazos, unidos como hermanos cuando el partido, por la vía de la encuesta interna, designe al candidato a la gubernatura que definirá el destino de Morena en Puebla en 2024? ¿Tendrá alguna posibilidad, dentro del partido de López Obrador, el senador Armenta Mier si el candidato presidencial de Regeneración Nacional resulta ser Adán Augusto López? Ya no hablemos si #EsClaudia, como a todo mundo se le ha hecho creer, ahí las posibilidades del presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República se resumen a una en un millón».
Recientemente –hace dos meses y medio–, cuando Ebrard aseguraba ser el garante de la unidad del partido de López Obrador; en mi columna “El ángel de Marcelo y el destino de un senador sin licencia”, comentábamos lo que sigue:
«No es obra de la casualidad que el senador comparta el mismo temor que el ex canciller: que Mario Delgado les haga “una chicanada”. Sin embargo lo que ninguno se atreve a reconocer es que la encuesta realmente es un eufemismo para hablar –en vieja clave priista– de la consulta a las bases de la representación morenista: gobernadores, diputados, senadores y presidentes municipales. Desafortunadamente para Armenta y para Marcelo, al día de hoy –para seguir con el argot de otros tiempos, que cada vez se parecen más a estos–, “está flaca la caballada”».
¿Rescatará el Comité Ejecutivo Nacional, a cargo de Mario Delgado, las aspiraciones de un senador que sólo obtuvo la confianza de seis militantes en el Consejo Estatal de Morena?
Aunque usted no lo crea la respuesta se ha vuelto irrelevante, debido a que ningún partido político en sus cabales le entregaría la candidatura a la gubernatura de Puebla a un perfil, quizá competitivo al interior de la entidad, pero con un riesgo altísimo de ruptura interna.
La cautela no es para menos: con una zona metropolitana en manos de la oposición a nivel municipal, con una fuerte alianza conservadora encabezada por Xóchitl Gálvez y Eduardo Rivera, y con un ex canciller que posiblemente termine con el Yuawi haciendo tiktoks; Morena definitivamente no está para experimentos en Puebla.
Por Enrique Huerta