El Ministerio de Justicia de Rusia pidió este viernes al Tribunal Supremo Ruso la prohibición del “movimiento internacional LGBT” por “extremista”.
De acuerdo a la petición, descubrieron que las actividades del movimiento LGBT dentro de Rusia, “incitan a la discordia social y religiosa” en violaciones de las leyes anti extremismo del país.
Las personas que sean declaradas culpables de participación en un grupo “extremista” tendrán que lidiar con largas condenas en prisión.
“En la práctica, esto probablemente significaría que esa persona podría ser encarcelada por tener una bandera del arco iris en su avatar”, dijo la periodista de investigación independiente Farida Rustamova al portal The Moscow Times.
Uno de los pocos activistas destacados de la comunidad LGBT+ que aún quedan dentro de Rusia ha declarado acerca de esta petición del gobierno bajo condición de anonimato por temor a represalias en su contra.
“Esta prohibición privará a las organizaciones LGBT+ de la oportunidad de operar y expondría a sus activistas y empleados al riesgo de ser procesados penalmente […] Esencialmente, implicaría un proceso penal basado únicamente en la orientación o identidad de cada uno”, declaró.
La homosexualidad en Rusia fue un delito hasta 1993 y se consideró una enfermedad mental hasta 1999. Pero en 2013, prohibió la “propaganda de relaciones sexuales no tradicionales”.
Por Redacción
Editor: Daniel Martínez
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