El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, acusó a las fuerzas armadas de Rusia de realizar crímenes de guerra durante la invasión que comenzó desde el pasado 24 de febrero de 2022.
Zelensky calificó los actos de los soldados rusos como los peores cometidos desde la Segunda Guerra Mundial y pidió al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) que las tropas de Moscú sean juzgadas por crímenes de guerra.
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En videoconferencia, el jefe de Estado ucraniano dio a conocer al Consejo que cientos de civiles han sufrido ataques, como disparos y uso de explosivos, por parte del ejército ruso.
“Les cortaron miembros, los degollaron. Las mujeres fueron violadas y asesinadas delante de sus hijos. Les arrancaban la lengua sólo porque su agresor no escuchaba lo que querían oír de ellos”, declaró el mandatario.
Frente al máximo organismo de la ONU, Volodimir Zelensky comparó a las tropas armadas del Kremlin con otros grupos terroristas, como el Estado Islámico, mientras mostraba imágenes de cadáveres en diferentes puntos del país.
““El ejército ruso buscó y mató intencionalmente a cualquiera que sirviera a nuestro país. Balearon y mataron a mujeres afuera de sus casas cuando solo intentaban llamar a alguien. Mataron a familias enteras, adultos y niños, e intentaron quemar los cuerpos”, aseguró el presidente de Ucrania.
Por su parte, algunos diplomáticos de Italia, España y Dinamarca se sumaron a las medidas de expulsión de diplomáticos rusos, iniciadas por los gobiernos de Francia y Alemania.
Dmytro Kuleba, ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, declaró que, para evitar más muertes, Occidente debe aplicar la “madre de todas las sanciones”: cortar la importación de gas y petróleo ruso.
“Unos meses de apretarse el cinturón valen miles de vidas salvadas”, aseguró Kuleba; sin embargo, esta medida ha divido a los 27 países miembros de la Unión Europea debido a las futuras consecuencias económicas.
Por: Redacción
Editor: Alejandro Rojas
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